14
enero
Título original: Distrito quinto
Año: 1957
Duración: 91 min
País: España
Dirección: Julio Coll
Guion: Julio Coll, Lluís Josep Comerón, Jorge Illa. Obra: Josep Maria Espinàs
Reparto: Alberto Closas, Arturo Fernández, Jesús Colomer, Carlos Mendy, Linda Chacón, Montserrat Salvador
Sinopsis
Cinco hombres cometen un atraco y huyen cada uno por su lado. Más tarde se reúnen en un local para repartirse el dinero. Mientras esperan a Juan, que es el que lleva el botín, cada uno de ellos se pone a imaginar lo que hará con su parte. Pero la espera se prolonga, y los ladrones empiezan a sospechar que su compañero nunca vendrá. Recuerdan entonces cómo lo conocieron y cómo se desarrollaron los acontecimientos hasta ese día.
RESEÑA DE LA PELÍCULA – RAPAZ
“RESERVOIR DOGS”
Película del año 1957, dirigida por Julio Coll, que también sería el productor y el guionista de la misma.
El argumento de “Distrito quinto” está basado en una obra teatral de Josep María Espinás. Tanto el argumento como la planificación, aun siendo una película de atracos, es eminentemente teatral. Si le quitamos un poco de moralina y algún dialogo del gusto de la censura franquista, nos encontramos con una base muy parecida a “Reservoir dogs” de Quentin Tarantino. Y esto es una opinión personal: que “Distrito quinto” no le era desconocido a un cinéfilo empedernido como es el bueno de Tarantino.
Coll sabe cómo mover a los actores y la cámara en un reducido espacio, empleando panorámicas y travellings, moviéndose con ligereza por un complicado decorado.
El reparto es sensacional, encabezado por Alberto Closas y Arturo Fernández, que cuando coinciden en plano saltan chispas. Los secundarios son también de lujo; Jesús Colomer, Carlos Mendy, Linda Chacón, Monserrat Salvador,Pedro de Córdoba y Carlos Otero.
Vamos a disfrutar esta vez, de una película “maldita” e injustamente olvidada de nuestro cine. Una magnífica muestra de cine negro de un director, periodista, crítico teatral, escritor y guionista, al que queremos sacar del olvido, y darle el reconocimiento que merece.